Las nueve musas
sueño apacible

El sueño apacible

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¿Por qué la vida psíquica no duerme? Hay, sin duda, algo que se opone a su reposo.

Sigmund Freud

El dormir apaciblemente, aunque no lo parezca, es un problema cotidiano para muchos, más aún porque a veces se desconocen algunas reglas imprescindibles para dormir bien, entre estas se encuentran las siguientes:

Cómo dormir placenteramente y sin insomnio
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  • No puedes dormir, y sabes por qué. No puedes abandonar asuntos estresantes. Si puedes, sustituye las imágenes desagradables por los logros obtenidos.
  • A pesar de todo no puedes dormir, entonces ¿por qué te obligas a ello? Es cierto que si al otro día se tiene que ir a trabajar o al centro de estudios sentirás el cansancio, pero de cualquier manera, dormir a la fuerza agudiza estrés durante el sueño. Sal de la cama, siéntate en algún lugar tranquilo, preferible sentarse lejos; si hay insomnio se debe a alguna causa.
  • Una vez fuera de la cama, reflexiona sobre las causas de por qué no puedes dormir, visualiza una tras otras las imágenes de tu situación general, pasándolas por tu mente como en una película. Si no aparece causa alguna, observa al momento de acostarte, cuales imágenes irrumpieron espontáneamente; en ellas está la respuesta.
  • Si conoces la causa del insomnio y no puedes hacer nada al respecto en ese momento, piensa, reflexiona y visualiza como lograr un ajuste emocional con el tema, al menos que te traiga algún alivio y te permita desviar tu atención para que entre el sueño. Visualiza reiteradamente el problema, y de esa manera este pierde sentido conmovedor, se “destiñe” emocionalmente. Llega un momento en que la atención se desvía hacia otro asunto, y empiezas a bostezar; el sueño se acerca.
  • Logrado el sueño, aunque sea ligero, usualmente el cerebro por sí solo sigue resolviendo el problema. A menudo, cuando abrimos los ojos, todo se ve mejor.

Debes saber al acostarte que puede parecer que el sueño continúa de la misma manera hasta despertar al amanecer, pero no es así. Existen dos tipos de sueño, y son completamente distintos entre sí, Rem y No-Rem. Ambos se alternan continuamente hasta el despertar. En las primeras horas predomina No-Rem, y Rem se produce más en las finales.

La fase No-Rem es llamada también sueño Delta. Responde predominantemente a la necesidad de descanso, y posee varias sub-fases. Estas se cuentan desde la uno, donde aún es muy ligera, hasta la cuatro, muy profunda y donde se logra un sueño plácido y restaurador. Es de destacar que el estrés o la fatiga intensa, impide llegar a la cuatro.

El sueño REM predomina mientras se acerca el despertar, y su nombre proviene del idioma inglés: Rapid Eyes Movement (movimiento rápido de los ojos), porque en ese sueño se observa por encima de los parpados como se mueven los ojos. Pero paradójicamente es un sueño muy profundo, donde coincide distensión muscular con elevado funcionamiento del cerebro a pesar de estar dormidos. Además, en REM lo soñado es más nítido y se recuerda mejor.

Además a menudo mientras duermes, y estando en Rem, el cerebro por sí mismo busca, procesa, elabora soluciones, crea, recuerda lo olvidado, manipula adversidades; todo mientras duermes. A menudo te acuestas buscando en tu mente solución a un problema, explicación a una interrogante científica, o con deseo de lograr la inspiración artística. O también teniendo mucho miedo, sufriendo una pérdida sensible, o agobiados por ansiedad, depresión, irritación, miedo, fatiga mental.

Sin embargo, mientras duermes el cerebro sigue trabajando para resolver los problemas y que lo veas todo distinto. En ocasiones, en medio del sueño, viene a la mente lo pretendido y te despierta. En otras aparece solo al abrir los ojos al amanecer. Puede ocurrir también que llega de pronto en el transcurso del día o los posteriores. Este hecho ocurre a menudo en músicos, escritores, poetas, científicos, pintores y otros que han utilizado el sueño a su favor.

fases del sueño

Para utilizar el sueño debes seguir estas indicaciones:

  • Ante todo, tener la absoluta convicción y confianza de lograr una solución, en lo que sea, Un sentimiento de impotencia, imposibilidad, de no se puede, sin que lo sepas, el cerebro actúa consecuentemente y por si solo te cierra los caminos. Tienes que estar convencido, desde el “fondo” de tu ser, que se alcanzaras tu propósito y bienestar. Con ese optimismo te acuestas a dormir.
  • Tampoco se puede ir al sueño con estrés acumulado durante el día. Terminar la jornada laboral e irse de inmediato a la cama es dañino, el estrés pasa al sueño y se agudiza. Se debe disfrutar de alguna recreación pasiva antes de ir a dormir; por ejemplo, ver un film o leer algo refrescante. Aun cuando se quede dormido en primera página, o frente al televisor, es preferible antes de ir tenso a la cama. No obstante, evita programas de televisión generadores de tensión. Si gustan, aunque sean terror, te distraen y reducen fatiga, pero si la tensión es excesiva se entorpece el sueño.
  • A pesar de todo es probable que regresen adversidades y problemas a tu memoria. No los evites, de cualquier manera vendrán espontáneamente, y a medida que los visualizas repetidamente dejan poco a poco de ser un sufrimiento.
  • Es en ese momento cuando debes comenzar a visualizar el problema, el que sea, en sus pormenores, causas, consecuencias, enlaces con lugares, hechos u otras personas; deja esa imagen en tu mente mientras te deslizas suave y serenamente al sueño.
  • En ocasiones el resultado aparece en tu mente estando dormido y te despierta, o lo hace en cuanto abres los ojos, y en otras te levantas y crees que no has podido resolver el conflicto, pero en el transcurso del día la solución te asalta a la mente de improviso.

Por otra parte, si cuando dormimos la consciencia se aparta mientras sigue el cerebro funcionando, entonces las imágenes de los sueños ofrecen la impresión de estar viviendo lo soñado. Nos parece real, pero es una realidad falsa. Algunas características de los sueños son las siguientes:

  • La mayoría son olvidadas al despertar.
  • Son producidas por experiencias agradables o desagradables durante el mismo día o en los anteriores; en ocasiones hasta años lejanos.
  • Las imágenes en el momento previo al dormir, se trasladan al sueño y se convierten en lo que soñamos.
  • Deseos no satisfechos aparecen en el sueño, generalmente distorsionados.
  • Condiciones ambientales como temperatura, luces, movimiento, dolores, necesidad de evacuación, desorden estomacal e intestinal, entre otras influencias, se reflejan de alguna manera en los sueños, pero a través de imágenes distorsionadas.
  • La tensión, ansiedad, depresión, fatiga, y otras, influyen en lo soñado, provocando pesadillas y otros trastornos del sueño.

Son interesantes los mecanismos de distorsión en el sueño. A continuación se exponen algunos escenarios:

  • Se desea vehementemente ver una persona dada, y a esta le gusta comer pescado frito. Se sueña entonces que estamos friendo pescado, aunque no aparezca la imagen de quien se desea ver.
  • En otro ejemplo el cual fue experimentado por mí, he soñado con gatos, y esto desde luego me es muy agradable, pero lo he interpretado como deseo de vivir en una zona donde yo sabía que pululaban esos felinos, mientras que donde vivía no se veía absolutamente ninguno.
  • Se observan sueños donde el protagonista de lo soñado no aparece en las imágenes, sino aparece alguien que se le asocia, no se está soñando con quien se está viendo sino con otra persona.
  • En otras ocasiones, con quien se sueña no le aparece su cara, sino que esta se observa cubierta o nula.
  • A menudo se dice: “sé que estaba soñando con…, pero quien aparecía no era él, sino…” En el fondo la persona sabe que el protagonista es otra persona.
  • El deseo no satisfecho generalmente se refleja en los sueños; por ejemplo, una mujer en búsqueda de satisfacción sexual, pero reprimida por prejuicios u otra razón, ha soñado que está siendo violada.
  • He conocido casos que el deseo exhibicionista en mujeres se traduce en estar huyendo desnudas por la calle.
  • Otro mecanismo expuesto es la fusión, la condensación, en las imágenes del sueño. Se puede encontrar que una persona sueña con un lugar y este se encuentra superpuesto a otro excesivamente alejado.
  • Entre estos mecanismos del sueño se encuentra también la sustitución de una imagen por otra, el cerebro escarba en la memoria y hace evocar recuerdos muy antiguos.
  • En numerosas ocasiones los recuerdos de largos años atrás no son más que deseos no conscientes, o conscientes, de volver a esa época.
José Ramón Ponce (†)

José Ramón Ponce

Doctor en Psicoanálisis, Universidad de Psicoanálisis Humanístico, Brasil.

Master en Psicología de la Salud, por la Walden University, Minnesota.

Licenciado en Psicología, certificado Josef Silny & Associates, Inc. Licencia de Hipnoterapia, USA.

Investigador Agregado por la Academia de ciencias de Cuba.

Fue miembro de la Sociedad de Neurociencias de Cuba, Sociedad de Psicología de la salud de Cuba, Grupo Nacional de Termalismo. Fundador y creador de la Sociedad Cubana de Hipnosis, en la Academia de Ciencias de Cuba. Miembro de la Sociedad Venezolana de Hipertensión arterial. Participante de eventos científicos nacionales e internacionales. Le han realizado numerosos reportajes de prensa por su trabajo.

Libros publicados:

Dialéctica de las actitudes en la Personalidad
El Sistema Psíquico del Hombre
Estrés emocional y su afrontamiento
Como estudiar mejor y sin estrés
Conversando con adolescentes
Un Hombre ante sí mismo
Hipnosis y relajación emocional.
Folletos en apoyo a la docencia.​

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